21 de septiembre de 2025: llega el segundo eclipse del mes
ASTRONOMÍA
Alex David León Muñoz
9/11/20252 min read


Septiembre de 2025 será un mes especial para los aficionados a la astronomía, ya que marcará el segundo eclipse en apenas unas semanas: tras el eclipse lunar del 7 de septiembre, conocido popularmente como la Luna de Sangre, el domingo 21 se producirá un eclipse solar parcial, que en lugares como Nueva Zelanda se apreciará al amanecer del lunes 22 debido a la diferencia horaria. Este fenómeno será visible en una franja concreta del hemisferio sur, incluyendo la costa este de Australia —especialmente Nueva Gales del Sur y Victoria—, varias islas del Pacífico y sectores de la Antártida.
Durante el evento, la Luna cubrirá parcialmente el disco solar, creando una silueta curva característica que modifica la luz ambiental y produce un efecto visual sorprendente, con sombras más definidas y cambios en los tonos del entorno, casi como si la claridad diurna se ralentizara por unos instantes. Aunque no será un eclipse total, el máximo del fenómeno permitirá observar cómo gran parte del Sol queda oculta tras la Luna, ofreciendo una imagen impactante que combina precisión astronómica y belleza natural. La dinámica del eclipse se desarrolla en fases: el inicio parcial marca cuando la Luna comienza a cubrir el Sol, seguido por el punto máximo de ocultación, y finalmente el fin parcial cuando el astro recobra su forma completa; en este caso, al tratarse de un eclipse parcial, solo se aprecian la entrada y salida del Sol tras la sombra lunar, pero con una claridad suficiente para disfrutar de la transformación de la luz y las sombras.
La observación directa requiere siempre protección ocular homologada, como gafas especiales o filtros solares, ya que mirar al Sol sin ellas puede causar daños irreversibles. Aunque desde España y Europa no será visible directamente, las retransmisiones en vivo de observatorios y portales especializados permitirán seguir cada detalle del eclipse parcial desde cualquier lugar. Este segundo eclipse del mes, además de su valor estético, muestra la precisión de los movimientos lunares y terrestres, y funciona como anticipo del próximo gran eclipse solar total del 2 de agosto de 2027, que durará más de seis minutos y será el más largo del siglo XXI, según la NASA.