Qué pasará cuando la inteligencia artificial supere la mente humana (y qué riesgos implica)
ARTÍCULOS TECNOLOGÍA
Alex León
10/6/20252 min read


Hace unos años, la idea de que una máquina pudiera superar a los humanos parecía ciencia ficción. Hoy, con los avances en inteligencia artificial, esa posibilidad ya no suena tan lejana. Cada nuevo modelo aprende más rápido, toma decisiones con menos errores y muestra una capacidad de razonamiento que antes creíamos exclusiva del cerebro humano.
Pero la gran pregunta sigue ahí: ¿qué pasaría si una IA llegara a pensar, crear y decidir mejor que nosotros? A eso se le llama superinteligencia artificial, y no se trata de un simple salto tecnológico, sino de un cambio en la forma en que entendemos la inteligencia misma.
Cómo cambiaría el trabajo y la autonomía tecnológica
Si una IA llegara a superar al ser humano, el impacto sería inmediato. Muchos empleos dejarían de depender de personas: desde médicos hasta ingenieros, abogados o artistas. Una IA con la capacidad de analizar, diagnosticar o diseñar sin descanso podría hacerlo todo con mayor precisión y menor costo.
Esto traería beneficios enormes, pero también problemas serios: pérdida de empleos, decisiones automáticas sin supervisión humana o el riesgo de que una IA tome el control de sistemas sensibles, como redes eléctricas o infraestructuras financieras.
El investigador Geoffrey Hinton, uno de los padres de las redes neuronales, ya advirtió que “la inteligencia artificial amenaza el empleo humano como nunca antes” y que el desarrollo sin límites puede volverse incontrolable.
También puedes leer: Geoffrey Hinton, Nobel de Física: “La IA amenaza el empleo humano como nunca antes”.
El poder global detrás de la inteligencia artificial
Las grandes potencias tecnológicas ya están compitiendo por liderar el desarrollo de la inteligencia artificial avanzada. Quien controle esta tecnología controlará también la economía, los datos y gran parte de las decisiones del futuro.
Ejemplos sobran: OpenAI, Samsung y SK Hynix están produciendo cientos de miles de chips para acelerar la capacidad de cómputo de los modelos, mientras que Albania nombró a Diella, la primera ministra de inteligencia artificial del mundo, para usar algoritmos en la lucha contra la corrupción.
Relacionado: Albania nombra a Diella: la primera ministra de inteligencia artificial contra la corrupción.
La IA en casa y en el día a día
La superinteligencia no solo afectaría a gobiernos o empresas. También llegaría a nuestros hogares.
Imagina asistentes que entienden tu estado de ánimo, electrodomésticos que se anticipan a tus rutinas o algoritmos que deciden qué información ves y qué omiten. Todo eso ya está empezando a ocurrir, aunque todavía no somos del todo conscientes.
Compañías como Meta ya exploran esta integración con sus gafas Celeste, que combinan realidad aumentada y control por voz impulsado por IA.
También te puede interesar: Meta lanza Celeste: gafas premium con pantalla AR y control por IA.
La inteligencia artificial está dejando de ser una herramienta para convertirse en algo más cercano a un compañero —o un competidor—.
Podría ayudarnos a resolver desafíos globales o, si se descontrola, convertirse en un problema del que no podamos escapar.
Por eso, la cuestión más importante ya no es si la superinteligencia llegará, sino cómo vamos a convivir con ella y qué límites deberíamos ponerle antes de que decida por nosotros.
Te puede interesar
Divulgación Científica y Tecnológica
Ciencia, Tecnología y Astronomía
Comunidad
© 2025. Todos los derechos reservados