Starship 11: el cohete más potente de SpaceX ejecuta su vuelo orbital más complejo
NOTICIAS ASTRONOMÍA
Alex León
10/15/20253 min read


El 13 de octubre de 2025, SpaceX realizó el vuelo de prueba número 11 de Starship, el cohete más grande y potente jamás construido. El lanzamiento se llevó a cabo desde la base Starbase en Boca Chica, Texas, a las 18:23 hora local, y marcó un nuevo paso técnico en el desarrollo del sistema de transporte espacial que la empresa de Elon Musk planea utilizar para misiones lunares, marcianas y de carga orbital. En esta ocasión, el vuelo incluyó por primera vez la separación en caliente entre la etapa propulsora Super Heavy y la nave Starship, el reencendido de motores en vuelo, la liberación de cargas simuladas y maniobras de reentrada controlada para ambas etapas. El propulsor descendió hacia el Golfo de México y la nave Starship realizó una trayectoria de reingreso atmosférico que permitió evaluar el comportamiento del escudo térmico y los sistemas de control de actitud.
Separación en caliente y reencendido en vuelo
Durante los primeros minutos del vuelo, Super Heavy ascendió con sus 33 motores Raptor hasta alcanzar la altitud prevista para la separación. A diferencia de vuelos anteriores, esta vez se utilizó el método de separación en caliente, en el que los motores de la segunda etapa se encienden antes de que se libere la primera. Esta técnica permite una transición más eficiente y fue ejecutada sin incidentes. Una vez en vuelo libre, Starship encendió uno de sus motores para simular una maniobra de corrección orbital, similar a las que se usarán en misiones lunares. Esta fase fue monitoreada en tiempo real por los equipos de control de SpaceX, que confirmaron la estabilidad de la nave y la correcta ejecución de la maniobra.
Amerizaje controlado y recuperación parcial
El propulsor Super Heavy descendió hacia el Golfo de México, donde realizó una maniobra de frenado y amerizaje controlado. Aunque no se recuperó físicamente, los datos obtenidos permitirán ajustar futuras maniobras de aterrizaje en plataformas flotantes. Por su parte, la nave Starship continuó su trayectoria hasta alcanzar el punto de reentrada atmosférica. Durante esta fase, se evaluó el rendimiento del escudo térmico, compuesto por losetas cerámicas diseñadas para soportar temperaturas extremas. La nave ejecutó maniobras de control de actitud mediante sus aletas aerodinámicas, y aunque no se intentó un aterrizaje completo, el descenso fue seguido por sensores y cámaras que registraron cada etapa del proceso.
Artículo recomendado: Detectan agua en 3I Atlas, el visitante interestelar que desconcierta a los astrónomos
Transición hacia nuevas versiones
Este vuelo marca el cierre de la serie de pruebas con la versión Block 2 de Starship. SpaceX ya trabaja en las variantes V3 y V4, que incorporarán mejoras estructurales, mayor capacidad de carga útil y sistemas optimizados para misiones tripuladas. Las próximas pruebas incluirán acoplamientos en órbita, transferencia de combustible y simulaciones de alunizaje, en preparación para las misiones Artemis de la NASA y los planes de colonización marciana. La empresa también planea integrar Starship con estaciones orbitales y plataformas de lanzamiento reutilizables, consolidando su sistema como el núcleo de su arquitectura espacial.
Artículo relacionado: Descubren un planeta errante que devora 6.000 millones de toneladas por segundo: Cha 1107-7626
Impacto en la exploración espacial
El vuelo 11 de Starship refuerza la posición de SpaceX en el desarrollo de vehículos reutilizables de gran capacidad. Mientras otras agencias espaciales y empresas privadas avanzan en sus propios proyectos, Starship se consolida como el sistema más avanzado en operación. Su capacidad para transportar grandes cargas, realizar maniobras complejas y ejecutar reentradas controladas lo convierte en una herramienta central para la próxima década de exploración espacial. Con cada prueba, SpaceX ajusta parámetros, recopila datos y modifica componentes, en un proceso iterativo que busca convertir los vuelos orbitales en operaciones rutinarias y económicamente sostenibles.
Lectura recomendada: ¿Por qué los meteoritos se queman al entrar a la Tierra? Explicación científica completa
Próximos pasos
Los próximos vuelos de Starship incluirán pruebas con carga útil real, simulaciones de acoplamiento con estaciones espaciales y ensayos de aterrizaje en superficies lunares. SpaceX también planea realizar vuelos de larga duración para evaluar la resistencia estructural y el comportamiento de los sistemas de soporte vital en condiciones prolongadas. La versión V3 incorporará mejoras en el sistema de propulsión, aislamiento térmico y distribución interna, mientras que la V4 estará diseñada específicamente para misiones tripuladas. Con cada iteración, el objetivo es acercarse a un sistema completamente reutilizable, capaz de operar con frecuencia y fiabilidad en entornos orbitales, lunares y interplanetarios.
Te puede interesar
Divulgación Científica y Tecnológica
Ciencia, Tecnología y Astronomía
Comunidad
© 2025. Todos los derechos reservados